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El presente es ahora

“No quiero que mi presente sea el tiempo que pierdo pensando en el futuro, porque el futuro no existe”. Pau Donés

Cuan identificados nos podemos sentir con esa frase. Por nuestro ritmo diario y distintas situaciones de la vida, nuestra cabeza siempre va más allá y no sabemos parar, hacemos todas las tareas que nos asignamos (y más si cabe) y entre ellas, todavía pensamos en el resto de cosas que nos quedan por hacer.

Así, pasa un día y otro, y otro, sin habernos dado cuenta de lo que realmente estaba pasando a nuestro alrededor, nos encontramos en el futuro todo el tiempo.

Ese ruido mental continuo, aunque estemos acostumbrados a él y no nos demos cuenta, nos genera estrés, y ya sabes lo que un estrés crónico le hace a nuestra microbiota. Por lo que hay que aprender a desconectar de ese ruido, y a conectarnos con el momento presente, y para ello, hay que entrenar.

Sí, tal cual lees, hemos olvidado tanto qué es el presente, que ahora tenemos que practicar poco a poco cómo volver a él. Pero no pasa nada, siempre tenemos la oportunidad de volver a empezar. Para ello, yo siempre recomiendo el mindfulness y por esta razón está incluido en mis sesiones. Te doy a continuación algunas técnicas muy sencillas:

En esos momentos de no parar, prueba a respirar profundo entre una tarea y otra (si no es posible eliminar algunas de la lista). La respiración es una herramienta muy útil y que no utilizamos prácticamente nada de forma consciente, concentrarnos en ella hace que pongamos el foco en algo concreto, aterrizando nuestra mente al presente más inmediato.

Otra cosa que te puede ayudar también es poner el foco durante unos minutos en algo que esté cerca tuyo: un olor, una imagen, una textura… Eso también hace que la mente se centre en algo que “no es urgente” y te rescata de esa marea de quehaceres.

Y por supuesto, si lo que quieres es un momento para desconectar de verdad, busca un rato al día, el tiempo que puedas, y haz algo que te guste: leer un libro, escuchar música sin hacer nada más, bailar, cocinar algo especial… 

Hay que vivir el presente, lo que te está ocurriendo ahora, lo que hay en tu alrededor. Acalla esos ruidos mentales y toma de nuevo las riendas de tu salud.

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